martes, 13 de noviembre de 2012

APRENDIENDO DEL CUTTING


Quiero comentar este video por el valor pedagógico que tiene.



Lo primero que se me ocurre es hablar del "oficio" que tienen estos once caballos. No cabe duda que los jinetes, absolutamente todos, son meros pasajeros a caballo. Las manos, a falta de riendas, sólo las utilizan para agarrarse bien, a la montura con una y a las crines del caballo con la otra, a excepción de un sólo jinete que hace todos los quiebros con las manos arriba... ayudándose con ellas a equilibrarse. No existe ningún control por parte del jinete, sino que los caballos, a base de repetición -llamémosle también entrenamiento- saben perfectamente lo que tienen que hacer: no perderle la cara en ningún momento al becerro para que no vuelva a su manada o aprisco (o como se llame…).

Primera conclusión que se me ocurre: velocidad de reacción del caballo. Sólo he leído en el estupendo libro de M. HONTAG "Psychologie du cheval", que la velocidad de reacción ante un mismo estímulo, en el caballo es un 30% más rápida que en el humano (todos tenemos in mente la cantidad de veces que nos ha "sorprendido" un caballo). Aquí, el estímulo lo provoca el becerro que quiere volver con los suyos a toda costa y ninguno lo consigue mientras el caballo actúa. Realmente, el agente es el toro y el caballo debe reaccionar -con una carga añadida, el jinete- para impedir que se salga con la suya. Conclusión, el becerro siempre va por delante, el caballo debe reaccionar para impedir que se salga con la suya y, por si fuera poco, con un jinete a cuestas (la carga añadida).
¿Es algo insólito este ejercicio -o disciplina hípica- sin cabezada?. Yo creo que no. En el CUTTING normal, en el que los caballos llevan su correspondiente cabezada, las manos del jinete hacen exactamente lo mismo que los vistos: no intervenir en absoluto o, de lo contrario, el caballo siempre llegaría tarde porque la mano del jinete retrasaría inevitablemente la reacción del caballo. Y, como en la Fórmula 1, estamos hablando de décimas de segundo, incluso menos.

Segunda conclusión: importancia de la repetición en el proceso de aprendizaje. Tal vez sea más importante en el caballo que en el hombre porque aquel no razona al ser el razonamiento -al menos el abstracto, el lenguaje-, privativo del hombre. Cedo la palabra a ARISTÓTELES porque nos dice mejor que nadie lo que supone la repetición:
Somos lo que hacemos día a día; por eso, la excelencia no es un acto, sino un hábito
Yo aclaro: los hábitos se adquieren por repetición. Este vídeo es un claro ejemplo de excelencia.

Tercera conclusión: cuántas veces las manos -incluso todo nosotros- son un estorbo en lugar de una ayuda, como siempre se le llama. La realidad es bien distinta. Aprovecho la ocasión para recomendar lo que yo considero una mano bien educada, o sea, una mano “bocherizada” (mal que les pese a los antibocheristas): dedos SI, bíceps NO. Y todos sabemos, o podemos aprender, a distinguir entre la acción -o tensión de rienda- de dedos y de bíceps. Es tan sencillo como concentrarse en pensar en ello. O sea, saber cómo manejamos nuestro propio cuerpo.

Cuarta conclusión (también una opinión personal): yo creo que hay que empezar pidiendo nosotros y acabar dejando que haga el caballo. En lugar de estar mandando continuamente. Vuelvo al principio: la velocidad de reacción del caballo es mucho mayor que la del hombre. Como ejemplo de la importancia del "dejar hacer" al caballo, traduzco un párrafo de otro importante libro, escrito en 1880: "Le cheval à coté de l'homme et dans l'Histoire" de CH. DE SOURDEVAL:
en ciertos pasajes de los Alpes se les presenta a los viajeros (nos está hablando de la segunda mitad del siglo XIX) los caballos sin cabezada, y esto por una razón: porque en los senderos peligrosos, un falso movimiento de la brida bastaría para ocasionar una caída por el precipicio; mientras que el caballo, disponiendo libremente de su cabeza y de su cuello, tantea el suelo con su labio superior, antes de apoyar el pie sobre el terreno sospechoso

Quinta conclusión… que me encantaría que alguien me aclarara (porque no la tengo del todo clara). Supongo que debe haber una relación muy directa entre la conformación -y equilibrio- del "cuarto de milla" y su función. La primera comparación que se me ocurre con nuestra vaquera es que al toro bravo siempre se le maneja por detrás buscando la querencia. En cambio, en "reining" se busca un cara a cara caballo con astado. Pido perdón y solicito corrección, si me equivoco.

Conclusión final: me gustaría que esta ocurrencia sirviera de reflexión a los practicantes de las disciplinas de salto de obstáculos  y de turismo ecuestre o marchas. Que no se me enfaden los de "reining" porque es de lo que menos entiendo. 

Paz y espero que os sirva a alguien 

miércoles, 7 de noviembre de 2012

JAEN 07.11.1993

Hoy hace 19 años que escribí las notas que acompaño. Fué en un cursillo en Jaén. Dichas notas se las dí a Javier Garzón quién, cómo no, las ha mantenido a buen recaudo hasta el día de hoy..
El mes pasado, a raíz de mi entrada sobre "El Ejercicio Primordial", Javier hizo un breve comentario en el que me recordaba que ya hace casi 20 años enseñaba lo mismo, y lo afirmaba con rotundidad porque conservaba unos apuntes míos de aquella época. Gracias a la guarda de Javier y a la diligencia de Eduardo, he podido disponer de ellos y releerlos vía skanner.
Efectivamente, creo que los principios que respetaba entonces son los mismos de ahora. Más que rectificar, hoy añado bastantes detalles que surgen, lógicamente, del paso del tiempo. Creo que es la diferencia con lo último que colgué en el blog (en breve espero colgar la segunda parte). El teclado con el que escribo esto,  sigue teniendo los mismos caracteres y sigue los mismos principios que hace un montón de años, pero la técnica es totalmente distinta. Esto es el progreso, cosa que me encantaría que ocurriera también en nuestro mundo del caballo.
Me he tomado la licencia de respetar la escritura porque, creo, es perfectamente legible.
Muchas gracias Javier, no sólo por guardar estos apuntes en el lugar correspondiente, sino también en tu corazón.
Paz y espero que os sirva a alguien